Canarias, Febrero del 2000                                                          

OPOSICIONES CANARIAS

PARA UNA ESCUELA CANARIA.

            Sin duda, la cuestión de celebrar oposiciones para acceder a una plaza pública es un problema que debemos afrontar los canarios para lograr que la mayoría de dichas oposiciones las aprueben canarios, porque el Gobierno Canario  no debe olvidar que este es un requisito fundamental para la buena vertebración y funcionamiento de la administración canaria en todas sus ramas para un buen servicio al pueblo.

            En el caso de las oposiciones a educación todavía es más importante, si cabe, lograr que las plazas las ocupen canarios porque no podemos olvidar que nuestros hijos perfeccionan el lenguaje en las escuelas y si los profesores son foráneos al final en vez de perfeccionar el habla canaria lo que hacen es desarrollar una situación de inferioridad con  aquellos que ocupan nuestros puestos de trabajo, al transmitirse los conocimientos, en otro habla.

Nos deforman nuestra habla y desarraigan a nuestros estudiantes de la realidad en la que tienen que vivir para luego acusarnos de que no estamos preparados. Y es que no podemos olvidar que nuestros hijos no sólo perfeccionan el lenguaje en las escuelas sino que también adquieren una visión del mundo que debe ir paralela a la que desarrollan en el seno familiar, porque esa visión es lo que toda persona utiliza para interpretar el mundo en que vivimos, y si la escuela y la familia entran en antagonismos al imponerse en la escuela una visión del mundo importada de otra realidad, aparecen la disfunción entre teoría y realidad, y con ello las consecuencias formativas y sicológicas.

La unión entre la realidad canaria y la escuela garantiza el equilibrio sicoemocional de los canarios, evitando el fenómeno tan común del desarraigo y una de sus secuelas la agresividad y la violencia. Así mismo, esa unión es el único método de formación del capital humano que Canarias necesita para dirigir su propio destino.

            La única forma de acabar con el conflicto que viven los enseñantes canarios, es a la vez la única forma que en la legalidad actual los canarios podemos garantizarnos una escuela canaria de calidad. Para ello el concurso de oposiciones debe ordenarse de forma que las pruebas favorezcan en primer término a los opositores canarios - profesores canarios para una escuela canaria-. Y en segundo término hay que primar a aquellos profesores que ya han demostrado con su servicio interino y/o sustituto que saben dar clases - buenos profesores canarios para una escuela canaria de calidad.

            Desde AMAGA, Alternativa Maga Nacionalista, proponemos un concurso de oposiciones con la filosofía que describimos a continuación: y con una puntuación como la que proponemos.

- Que en todas las pruebas se prime:

la utilización de palabras, campos semánticos y formas verbales del habla canaria tanto en la preguntas como en las repuestas, primando la puntuación para aquellos que los utilizan.

la utilización de las estructuras gramaticales propias del habla canaria, primando la puntuación a aquellos que las utilicen.

- Que en los temas a desarrollar se exija que los mismos estén estructurados a partir de la realidad canaria, exigiendo que la explicaciones de contenidos estén en todo momento interrelacionadas con lo que sería la actividad educativa en si.

- Que se articule un apartado de méritos en donde los profesores puedan ver compensado los servicios prestados a la comunidad educativa canaria.

            En esa línea desde AMAGA, Alternativa Maga Nacionalista planteamos un concurso de oposiciones conformado por tres partes, en un proceso opositor de evaluación continua, en coherencia con la actual forma de evaluación en el mundo académico. De esa forma las pruebas no serán eliminatorias sino que los opositores pasaran todas las pruebas y al final se sumaran todos los puntos obtenidos hasta un máximo de 15, accediendo a las plazas opositadas el número de notas más altas hasta cubrir la oferta de plazas, siempre y cuando las mismas superen un mínimo de 7,5 puntos. Los puntos se repartirán de la siguiente forma:

            1ª.- Desarrollo de un tema de la especialidad:

El tema en toda su extensión debe ser explicado haciendo conexiones y paralelismo con la realidad canaria. De lo contrario se puntuará con un 0 lo que concierne al desarrollo del tema.

Así mismo, en el desarrollo del tema quedarán unidos a los contenidos teóricos del mismo, los elementos y estructura pedagógica de la explicación. Se valorará el que los elementos y estructura pedagógicos planteados sean iguales o semejantes a alguna experiencia práctica del opositor si este la hace constar.

La puntuación de esta prueba estaría conformada por cinco partes y un total de ocho puntos que se evaluarían como sigue:

·      Por desarrollo temático:             5,25 puntos.

·      Por utilización de palabras y campos

  semánticos propios del habla canaria,

  así como de sus formas verbales               1,00 puntos.

·      Por adecuación a las estructuras

   gramaticales del habla canaria                  0,75 puntos.

·      Por vincular los elementos

   pedagógicos a una experiencia                 1,0 puntos.

            2ª.- Desarrollo de un tema LOGSE:

El tema LOGSE será puntuado con un máximo de 3 puntos, los cuales serán evaluados como sigue:

·      Por desarrollo del tema                          2,00 puntos.

·      Por utilización de las palabras

  campos semánticos, formas

  gramaticales y verbales canarias                1,00 puntos.

3ª. Concurso de méritos:

El concurso de méritos a la vez que reconocer la labor desempeñada en el sistema educativo por los opositores que tengan experiencia profesional, pretende también evaluar la calidad de esa experiencia por lo que proponemos un concurso de méritos que no se fije en los años en sí, sino que valore las experiencias pedagógicas practicadas.

Proponemos que dichos trabajadores tengan oportunidad de subir su puntuación en 4 puntos por experiencias educativas-pedagógicas vinculadas con la realidad canaria y realizadas en diferentes cursos académicos. De forma que:

·       Por cada experiencia constatada en el último curso antes de las oposiciones se le sume 0,15 puntos hasta un máximo de 1,5 puntos -10 experiencias pedagógicas- en ese año.

·       Por cada experiencia constatada de cursos anteriores al último se puntúe con 0,076 puntos hasta un máximo de 2,5 puntos - 33 experiencias pedagógicas.

            Para poder articular las diferentes pruebas creemos necesaria una moratoria de un año en el cual se deben poner en marcha los mecanismos que hagan efectivo el procedimiento, para lo cual es necesario:

1.     Creación por la Academia Canaria de la Lengua de listados de palabras, campos semánticos, formas verbales y estructuras gramaticales diferenciadores del habla canaria, así como los sinónimos en otras hablas panhispánicas.

2.     Creación en el seno de la Consejería de un departamento con estructura insularizada para la recogida y acreditación de las experiencias pedagógicas del profesorado en activo.

Los profesores deberán elaborar y entregar las memorias de la experiencias pedagógicas desarrolladas, después de convalidarlas con la dirección de los centros en que las aplicaron. En caso de conflicto entre el profesor y dicha dirección la inspección educativa resolverá el conflicto.

La entrega de dichas experiencias en principio tendrá dos procedimientos;

·      Para los años anteriores al último curso se dará un plazo hasta Abril para que los profesores puedan entregar las memorias de las experiencias a tener en cuenta.

·      Para el último curso, los profesores tendrán tiempo de entregar las memorias hasta el inicio del mes de las propias oposiciones.

El departamento expedirá certificado de los puntos con que cuenta cada profesor, certificado que deberá renovarse cada año por la incorporación de las nuevas experiencias del último curso, y la reevaluación de las experiencias del penúltimo curso.

AMAGA, Alternativa Maga Nacionalista

José Alemán Hernández.